La electrodiálisis es un proceso de tratamiento de fluidos basado en la aplicación de un campo eléctrico mediante dos electrodos entre los que se sitúan un conjunto de membranas impermeables y iónicamente selectivas, que permite separar elementos minerales en solución a partir del movimiento de disociación de iones a través de dichas membranas y la creación de dos flujos diferentes: el desalado, también llamado diluido, y el de alta concentración de sales llamado concentrado.